Esta vez nos toco a nosotros...

Una vez más. Algo altero nuestro día. Una noticia que no es muy común acá en nuestra ciudad, pero como esta yendo la cosa, la inseguridad de mal en peor, tarde o temprano iba a suceder. Me cuesta terriblemente decir esa frase. Pero es algo que todos vemos día a día.

Calculo que todos se deben haber enterado de este aberrante hecho, pero para los que no lo están, ahora les cuento lo que sucedió según las fuentes locales.

“El policía de Seguridad Vial fue asesinado esta mañana, alrededor de las 10.30, por un delincuente que estaba robando en el kiosco Mariana, el cual está ubicado en Domingo Vázquez 850 y es propiedad de su abuela.
La fiscal Verónica Vidal confirmó que fueron dos los delincuentes que cometieron el ilícito y que Marcelo Martínez, de 27 años, llegó al lugar luego de que a su madre, con la que estaba realizando un trámite bancario, le avisarán que había movimiento sospechosos en el comercio familiar. Al salir Martínez en defensa de su abuela, se trenzó en pelea con el ladrón, quien logró arrebatarle su arma reglamentaria y lo ultimó. Se investigaba si hubo una agresión previa con un arma blanca.
Posteriormente, arribó al lugar de los hechos para brindar apoyo el oficial de la Comunal Darío García quien tras una persecución logró abatir a Fabián Montero, de 21 años, en la esquina de Cangallo y Laprida, aunque con el intercambio de balazos un proyectil impactó en su abdomen. Vecinos fueron quienes lo pusieron en conocimiento de la situación y le indicaron por dónde había huido el ladrón.”

Algo que quiero agregar y que esta en este mismo informe, es que Marcelo Martínez, había ido al polirubro de su abuela, para salvarla de aquel horrible momento, algo que cualquier ser humano haría por sus seres queridos.
Estas injurias, además de cometer este tipo de delitos, estaban vinculados, por si fuera poco, con droga (según fuentes policiales que expresaron en LU24).

Volviendo al hecho. Este policía además de cumplir con su deber, el de protegernos, se vio motivado por otra razón, que era la de salvar a su propia abuela. Imaginense la situación. La impotencia que le puede agarrar a uno. Trato de salvar a su abuela y al cabo de unos minutos, Marcelo se encontraba tendido en el suelo. Muerto. Sin ser culpable de nada. Sin otra razón que haber muerto por cumplir con su deber y por arriesgar su vida salvando a un ser querido.

YO NO AGUANTO MAS. No aguanto más. No soporto prender la televisión y ver siempre lo mismo. Algo interminable y que cada día crece mas. Y que no hay soluciones visibles. Y que hay que aguantar a todos las incompetentes que tenemos como gobernantes prometiendo cosas. Dicen todo lo que el pueblo quiero oír. Pero no hay resultados. Ya me hicieron perder toda la fe que les tenia, a mi y a miles y miles de compatriotas que esperamos una solución a todo esto.

Y quiero aclarar otra cosa, que me parece que se lo debe reconocer al igual que a Martínez. Hablo del otro oficial que acudió a la ayuda con una actitud heroica, Darío García, que al ver que su compañero estaba en el suelo y que los delincuentes escapaban cobardemente, sale en busca de ellos para cumplir con su deber y no dejar que estas basuras sigan rondando como si nada por nuestra ciudad. Tras hacer unos metros, se inicia un tiroteo y el oficial recibe un balazo en su abdomen, pero logra reincorporarse con ayuda de los vecinos y sale nuevamente en su búsqueda, hasta que se inicia un nuevo tiroteo y finalmente logra abatir a uno de los delincuentes.

Quiero que piensen y que expresen lo que sientan. Una nueva familia destrozada por culpa de una rata asquerosa que termino con la vida de un ser querido para ellos. Un joven que al igual que muchísimos de esta profesión, trabajaba por el bien de nuestra Nación e intentaba brindarnos un poco mas de seguridad en estos tiempos difíciles.
Esto, por mas que no sea en hecho cotidiano en Tres Arroyos, el de los asesinatos, hay que pensar que si lo es en muchas (demasiadas) ciudades del pais. Tal vez aca no nos esten matando a tiros como en las otras ciudades, pero sufrimos excesivos robos, golpizas totalmente brutales a jóvenes y ancianos. Y cuando hablamos de golpizas son golpizas por el hecho de pegar nomás, hay veces que son para sacarte tus pertenencias pero muchas otras veces es por el absurdo hecho de golpearte. No quiero irme de tema, pero piensen y opinen sobre esta injusta situación, que lamentablemente este martes le toco vivir a esta familia y a todos los tresarroyenses. Es hora de que el pueblo tome conciencia y sea prudente, firme y tome una decisión para que nuestra hermosa Nación renazca, florezca. Luchemos por lo que nuestra Patria se merece. Que esta y todas las muertes y males que nos azotan no sean en vano.
Jamás nos acostumbremos a esto.

Viva la Patria!!